
Pero podemos ir directamente, y responderle: “Opino lo mismo que su madre”. Eso es lo que hizo un sacerdote en Madrid, cuando el taxista se burlaba de él y le preguntó el día de San Lorenzo de 2010” . Y se quedó mudo en todo el trayecto; claro, se dio cuenta el conductor de que si su madre hubiera opinado a favor del aborto, no estaría él en eso momento trabajando en un taxi.
Por tanto, vista la dureza de muchos de no querer ver la evidencia, desde luego lo mejor es ir directamente a tocar en la sensibilidad y con ello en el entendimiento de manera casi directa. Por lo menos hace pensar un poco más.
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