¿Cuánto vale una vida? Decía el profesor Severo Ochoa que sólo somos química. Pero yo me pregunto, ¿el hecho de decir que se es química no hace pensar que estamos efectuando ya un raciocinio espiritual?.
Esa manera de pensar, llevada a sus consecuencias da lugar a la aberración de eliminación de aquellas personas que no aportan beneficios económicos, o que supone un esfuerzo cuidarlas.
Y estoy pensando en cómo pueden sentirse tantas y tantas personas que llevan su enfermedad con dignidad y luchando día a día por la vida calladamente, esa valentía sí que merece ser imitada y admirada. Buena prueba de ello es el optimismo que se observa en Lourdes y en la página web del Hospital Nacional de Parapléjicos: www.infomedula.org.
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